Watches and Wonders 2024: Van Cleef & Arpels rinde homenaje a sus métiers d’art
Sin duda alguna, las novedades de Van Cleef & Arpels durante Watches and Wonders nos dejaron suspirando. Y es que no solo los movimientos son excepcionales, pero los métiers d’art; sus técnicas tan innovadoras, y la belleza de sus creaciones robaron miradas importadas durante la gran feria internacional.
Durante esta edición del Salón, la Maison decidió rendir homenaje a la centenaria maestría con que los artesanos crean y perfeccionan cada técnica para crear jardines y paisajes encantados.
Nuestros dos favoritos: Lady Arpels Jour Enchanté y Lady Arpels Brise d’Été. Ambas, creaciones fieles a los códigos estéticos e inspiraciones de la casa: la naturaleza; como las hadas y los jardines encantados.
Lady Arpels Jour Enchanté. Se trata de un reloj con caja de 41mm en oro blanco. Contiene piedras preciosas como zafiros de colores, spessartites grenats, diamantes y turquesa. Y un movimiento mecánico de cuerda manual.
Lady Arpels Brise d’Été. Reloj con caja de 38mm de oro blanco. Un movimiento mecánico de cuerda automática, dotado de un módulo autómata con animación a la carta. Y técnicas de esmalte y pintura en miniatura. Facts: las mariposas giran al rededor de las flores con el movimiento de animación.
Lady Arpels Jour Nuit
Presentado por primera vez en 2008, Lady Arpels Jour Nuit se reinventa para este 2024. Con dos nuevos modelos de 33 y 38mm Van Cleef & Arpels rinde homenaje a el cielo estrellado y sus maravillas.
Lady Jour Nuit. Luna y estrellas engastadas en diamantes y el sol en oro amarillo guilloché.
Tres años de desarrollo y la maestría artesanal de la Maison se requirieron para que estas obras vieran la luz durante esta edición de Watches and Wonders 2024.
No olvides seguirnos en nuestras redes.
Lady Arpels Jour Nuit. Luna y etsrellas engastadas en diamantes, mientras que el sol se encuentra engastado con zafiros amarillos.
Ambas creaciones contienen un disco giratorio de 24 horas, mostrando la maravilla del ballet de los otros. Y un cristal de aventurina de Murano que, por la presencia de mineral en un crisol, el vidrio adquiere un color azul profundo, como el del cielo estrellado.
Imágenes: cortesía Van Cleef & Arpels.