Inspiración histórica y características de vanguardia
Omega presenta el Speedmaster Pilot, un modelo que rinde homenaje a su legado en aviación y explora nuevas fronteras de precisión. Con un diseño de 40.85 milímetros inspirado en el Speedmaster original de 1957, este reloj combina la robustez y funcionalidad que hicieron del modelo inicial la elección predilecta de los pilotos de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. Fabricado en acero inoxidable con un acabado mate, evita reflejos de luz para garantizar la claridad incluso en condiciones exigentes. Su bisel de aluminio incluye detalles clásicos como las marcas “Dot Over Ninety” y “Diagonal to Seventy”, que refuerzan su conexión con la herencia Speedmaster.
Funcionalidad para exigentes
La esfera negra mate granulada ofrece visibilidad total, gracias a sus marcadores de horas y manecillas recubiertas con Super-LumiNova verde. La manecilla central del cronógrafo, en negro mate con una punta de avión barnizada en naranja, añade un toque distintivo. Dos subesferas aportan funcionalidad y nos remiten al mundo de la aviación: una a las 3 horas con un indicador de 60 minutos y 12 horas, con una manecilla naranja mate y números blancos, y otra a las 9 horas que presenta una pantalla de segundos pequeños con una estética similar a un horizonte artificial.
Además, el Speedmaster Pilot está equipado con el calibre Co-Axial Master Chronometer 9900, certificado por METAS. Este movimiento garantiza la máxima precisión, resistencia magnética y rendimiento. Protegido por un fondo de caja metálico grabado con el icónico caballito de mar del Speedmaster, ofrece una resistencia al agua de hasta 100 metros.
Tradición ligada al vuelo
Desde la Segunda Guerra Mundial, Omega ha sido sinónimo de confianza para los pilotos. Modelos como el UK/CK2292, distribuidos a la RAF y la Fleet Air Arm, demostraron su resistencia magnética frente a los potentes motores de aeronaves como el Hurricane y el Spitfire. En 1957, el Speedmaster original fue adoptado por pilotos de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, quienes posteriormente llevarían la marca al espacio durante las misiones Mercury.
El lanzamiento del Flightmaster en 1969 reforzó la posición de Omega como un aliado clave de la aviación, ofreciendo un cronógrafo diseñado específicamente para pilotos. Ese mismo año, los instrumentos de Omega se convirtieron en estándares para el Concorde, y pilotos como John Hackett confiaron en la marca para mantener el tiempo exacto durante sus vuelos transatlánticos.
El nuevo Speedmaster Pilot se ofrece con un brazalete de acero inoxidable ajustable o una correa NATO gris reforzada con hilos de KEVLAR®. Ambos diseños aseguran comodidad y durabilidad, consolidando este modelo como una herramienta indispensable para quienes buscan precisión y estilo en las alturas.