Girard-Perregaux Tourbillon con tres puentes volantes: leyenda en reinvención

Creado en La Chaux-de-Fonds, cuna de la alta relojería y Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, el Tourbillon con tres puentes volantes de Girard-Perregaux destaca por su diseño revolucionario y un uso magistral de la luz, tal y como en la manufactura. Este modelo es una expresión contemporánea del arte relojero, combinando historia, innovación y un estilo inconfundible. Su diseño esqueletizado permite apreciar los tres puentes de oro que parecen flotar dentro de una caja llena de luz.

Innovación y tradición en perfecta armonía

Desde 1856, Girard-Perregaux ha dejado una huella imborrable en la historia de la relojería. En la década de 1860, Constant Girard reinventó el concepto de los puentes, dándoles un papel estético además de funcional. En 1889, la marca lanzó su famoso Tourbillon con tres puentes de oro, un ícono del diseño relojero que sentó las bases para futuras innovaciones. Luego, en 2021, la Manufactura presentó una versión moderna: el Tourbillon con tres puentes volantes, un modelo que incorpora una estructura avanzada del movimiento y una cuidada estética que juega con la luz natural.

Girard Perregaux Tourbillon Flying Bridges

Los tres puentes, característicos de este modelo, cumplen una doble función: soportan los engranajes, el barrilete y el tourbillon, y al mismo tiempo proporcionan una integridad estructural esencial. Están fijados a unos elegantes zócalos calados que emergen de la caja, dando la ilusión de que los puentes flotan en el aire. Sin una esfera tradicional, los índices se montan directamente en la caja, reforzando la apariencia etérea y liviana del reloj.

Diseño refinado y mejoras sutiles

El Tourbillon con tres puentes volantes de 2024 introduce mejoras clave que lo hacen más atractivo y funcional. Los nuevos índices ahora incluyen bastones gemelos a las 12 horas, y los cristales de zafiro “box” han sido rediseñados para ser más curvados y simétricos, mejorando la visibilidad lateral del reloj. La corona, más grande y redondeada, facilita su manipulación, y las asas acortadas y una caja más redondeada aumentan la comodidad, especialmente para usuarios con muñecas más delgadas.

La atención al detalle se extiende a las agujas, que ahora tienen un acabado satinado y más Super-LumiNova, mejorando la legibilidad en condiciones de poca luz. El reloj viene con dos correas: una con efecto tejido y otra en piel de aligátor negra, que destaca por un elegante acabado dorado.

Reverso de caja transparente
Un clásico reinventado

A pesar de las actualizaciones, el Tourbillon con tres puentes volantes mantiene elementos esenciales que lo conectan con su legado. Los puentes de oro, revestidos en PVD negro, destacan por sus bordes biselados que revelan el brillo del oro rosa, un detalle conseguido tras dos días de minucioso trabajo de pulido. Este modelo sigue siendo un símbolo del compromiso de Girard-Perregaux con la tradición y la innovación, fusionando artesanía, historia y tecnología de vanguardia en una pieza que captura la esencia de la alta relojería.

Girard-Perregaux continúa desafiando los límites del diseño y la técnica relojera, y el Tourbillon con tres puentes volantes sigue siendo un testimonio de su maestría, capaz de enamorar a coleccionistas y apasionados de los relojes de todo el mundo.

NO TE PIERDAS: Girard-Perregaux 1966 Château Latour: de tiempo y vinos

Especificaciones técnicas:

  • Caja de oro rosa de 44 milímetros de diámetro
  • Hermeticidad 30 metros
  • Cristal de zafiro
  • Movimiento de cuerda automática, calibre GP09400-1273
  • Reserva de marcha de 60 horas
  • Funciones de tourbillon, horas, minutos, segundero pequeño en tourbillon
  • Correa de caucho negro efecto tejido y piel de aligátor con efecto dorado, con cierre triple desplegable de oro rosa.